¡Hola a todos! Hoy compartimos con vosotr@s el último episodio del podcast de Acupcan: una entrevista fascinante con Mónica González Tovar, una apasionada experta en Alimentación Natural Animal. Mónica nos cuenta su inspiradora travesía hacia la dieta BARF para perros y gatos, y cómo ésta transformó la vida de su propia compañera animal.

La historia de un cambio de vida

Todo comenzó con su perra, que durante su primer año de vida sufrió constantemente de problemas gastrointestinales, como diarreas y vómitos frecuentes, además de problemas de piel. Tras un sinfín de cambios de pienso sin éxito y la recomendación de varios veterinarios, Mónica se encontró desesperada por encontrar una solución real para el desequilibrio de su perra.

La situación llegó a un punto crítico cuando, al probar un pienso muy caro recomendado por especialistas, Mónica notó que sus manos quedaban grasosas al tocar el alimento, lo que la llevó a cuestionarse profundamente con lo que estaba alimentando a su perra. Este fue el punto de inflexión que la impulsó a investigar y finalmente descubrir la alimentación natural, específicamente la dieta BARF, gracias a las enseñanzas del Dr. Ian Billinghurst, pionero en el tema.

Beneficios que cambiaron una vida

Al cambiar a una dieta basada en carne cruda, huesos, vísceras y algo de vegetales fermentados, Mónica observó una mejora milagrosa y rápida en la salud de su perra. Los problemas digestivos desaparecieron casi de inmediato, y su calidad de piel y energía general mejoraron significativamente. Esta experiencia no sólo alargó y mejoró la calidad de vida de su perra hasta casi los 16 años, sino que también redefinió la carrera de Mónica hacia la promoción de esta dieta.

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Desmontando mitos sobre la dieta BARF

Uno de los aspectos más valiosos que Mónica González Tovar abordó en su entrevista en el podcast de Acupcan fue el de los mitos y temores que rodean la dieta BARF. Muchos responsables de animales tienen preocupaciones legítimas que, sin embargo, se basan a menudo en información incorrecta o incompleta. Aquí están algunos de los principales mitos que Mónica nos ayudó a clarificar:

Los huesos son peligrosos para los animales. Este es probablemente el temor más común. Muchos responsables de perros y gatos temen que los huesos crudos puedan astillarse y causar daños internos. Mónica explicó que los huesos crudos, especialmente los de aves como el pollo o el pavo, son blandos y seguros para los perros y gatos, siempre y cuando se administren de manera adecuada. Los huesos cocidos, en cambio, sí son peligrosos porque pueden astillarse fácilmente.

La dieta BARF es insalubre debido a bacterias como la salmonela. Mónica señaló que tanto perros como gatos tienen sistemas digestivos diseñados para manejar cargas bacterianas más altas de las que los humanos pueden soportar. Además, una manipulación higiénica adecuada y el almacenamiento seguro de los alimentos minimizan cualquier riesgo potencial.

Es difícil proporcionar una dieta equilibrada con BARF. Otro temor común es que la dieta BARF no proporcione todos los nutrientes necesarios, lo cual podría llevar a deficiencias. Sin embargo, Mónica enfatizó que con una educación adecuada sobre las proporciones y tipos de alimentos (carne, huesos, órganos y algunos vegetales), es completamente posible ofrecer una dieta balanceada y nutritiva.

Cambiar a BARF es demasiado complicado y laborioso. Algunos responsables de mascotas se sienten abrumados por la idea de preparar comidas crudas en casa. Mónica nos anima a empezar de manera simple y a aprender gradualmente a ajustar la dieta según las necesidades del animal. Muchas personas encuentran que, una vez adaptados, preparar alimentos BARF no es más complicado que las comidas cotidianas.

Los animales no aceptarán la dieta BARF después de estar acostumbrados al pienso. Aunque algunos animales pueden ser reticentes al cambio inicialmente, la mayoría se adapta rápidamente al sabor y la textura de los alimentos crudos una vez que se realiza la transición de forma gradual y paciente.

Mónica enfatizó la importancia de abordar estos mitos con información precisa y basada en la experiencia práctica y científica, permitiendo a los responsables de animales tomar decisiones informadas que beneficien la salud y bienestar de sus mascotas. Al desmitificar estas preocupaciones comunes, podemos abrir el camino para que más personas consideren la dieta BARF como una opción viable y beneficiosa para sus animales.

¿Cómo empezar con la Dieta BARF?

Adoptar la dieta BARF para tu perro o gato puede parecer desafiante al principio, pero con los consejos adecuados y un enfoque gradual, es totalmente manejable. Basándonos en la valiosa experiencia compartida por Mónica González Tovar en su entrevista con Acupcan, aquí te ofrecemos una guía detallada sobre cómo iniciar este cambio nutricional en la vida de tu compañero animal:

Paso 1: Educación y planificación
Antes de empezar, es esencial entender los fundamentos de la dieta BARF. Esto incluye conocer las proporciones adecuadas de carne, huesos, órganos y vegetales. Mónica enfatiza la importancia de la educación previa para asegurarse de que estás proporcionando una dieta equilibrada. Hay muchos recursos disponibles, incluyendo libros, seminarios web, y cursos en línea como los que ofrece Mónica a través de su escuela online «La Madriguera» o también en Acupcan.com.

Paso 2: Consulta veterinaria
Habla con un veterinario que tenga experiencia o esté abierto a la alimentación natural. Es crucial asegurarse de que la dieta cubra todas las necesidades nutricionales de tu perro o gato, especialmente si tiene condiciones de salud especiales. El veterinario o experto en Nutrición Natural Animal puede ayudarte a ajustar la dieta según las necesidades individuales de tu animal y proporcionarte consejos para una transición segura.

Paso 3: Introducción gradual
Mónica recomienda iniciar la transición a la dieta BARF gradualmente. Esto puede significar incorporar pequeñas cantidades de carne cruda en la dieta actual de tu compañero animal y aumentar lentamente la proporción mientras reduces el pienso o la comida enlatada. Observa cómo reacciona el animal y ajusta la velocidad de la transición según su aceptación y su salud digestiva.

Paso 4: Manejo seguro de los alimentos
Aprender a manejar y almacenar correctamente los alimentos crudos es fundamental para minimizar el riesgo de contaminación bacteriana. Mónica aconseja practicar una buena higiene, como lavarse las manos antes y después de manipular la comida cruda y mantener los alimentos crudos separados de otros alimentos en tu cocina.

Paso 5: Supervisión y ajuste
Una vez que tu compañero haya cambiado completamente a la dieta BARF, continúa supervisando su salud y bienestar. Puede ser necesario ajustar las proporciones o los ingredientes dependiendo de cómo tu perro o gato responda a su nueva dieta. Presta atención a su peso, energía, calidad de su pelaje y salud general.

Paso 6: Disfrutar de los beneficios
Con paciencia y seguimiento, deberías comenzar a ver mejoras en la salud y el bienestar de tu mascota. Mónica destaca que muchos dueños de mascotas reportan un pelaje más brillante, mejor salud dental, más energía y menos problemas de salud después de hacer el cambio a BARF.

Resumen de consejos prácticos para adoptar una Dieta Barf

  • Comienza despacio: No tengas prisa por eliminar completamente el pienso de la dieta de tu perro o gato.
  • Observa y aprende: Cada animal es único. Observa cómo reacciona tu compañero y aprende de esa respuesta.
  • Mantén el equilibrio: Asegúrate de que la dieta sea nutricionalmente completa.
  • Busca apoyo: Únete a comunidades en línea, consulta con profesionales y conecta con otros responsables de animales que siguen la dieta BARF para consejos y apoyo.

Siguiendo estos pasos y guiándote por los consejos expertos de Mónica González Tovar, estarás bien equipad@ para proporcionar a tu mascota una dieta saludable y natural que puede enriquecer significativamente su calidad de vida.

Recuerda, la transición a la dieta BARF no tiene que ser complicada. Al igual que nosotros, nuestros amigos peludos se benefician de una alimentación más natural y ajustada a sus necesidades evolutivas. Y como nos recuerda Mónica, lo más importante es hacer lo mejor que podemos en cada momento, sin culpas ni presiones. ¡Animémonos a dar a nuestros perros y gatos la vida saludable que merecen!